
La derrota por 6-1 ante el Bayern Munich en Champions la semana pasará factura al equipo francés, cuyas aspiraciones de clasificarse para los octavos de final de la competición más laureada del fútbol europeo se han quedado en el camino.

Aspiraciones de clasificarse para los octavos de final de la competición más laureada del fútbol europeo se han quedado en el camino
Lideran la parte más baja del Grupo F, sin puntos en su casillero. Por suerte para ellos, las cosas van mucho mejor para la afición del Lille en su país, y es que tras tres victorias seguidas, el combinado de Rudi García está punto de dar caza al PSG en lo más alto de la tabla.
El Lille ganó la temporada 10-11 y lo celebraron trasladándose al nuevo estadio Grand Stade Lille Metropole construido con motivo de la Eurocopa de 2016.
Una nueva casa de 282 M€ que aporta unos beneficios que el anterior Stade Grimonprez Jooris, con una calificación de cinco estrellas de la UEFA.
El nuevo estadio es un lugar que cualquier club en el fútbol mundial soñaría con tener. Cuenta con más de 50 000 asientos y tiene el potencial de albergar futuras finales europeas.
Financiado por el gobierno, la ciudad de Lille y el propio club, el estadio dispone de techo retráctil, dos molinos de viento y un campo desmontable. Será sede de los partidos de la Eurocopa de 2016.
Sin embargo, al Lille le costó cierto tiempo adaptarse a su nueva casa, y tuvo que esperar a conseguir su primera victoria hasta principios de octubre.
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